Red de conocimiento informático - Conocimiento sistemático - Los padres deben conocer el impacto de la adicción de sus hijos a los teléfonos móviles lo antes posible y decirles estas cosas a sus hijos.

Los padres deben conocer el impacto de la adicción de sus hijos a los teléfonos móviles lo antes posible y decirles estas cosas a sus hijos.

Ser adicto a los teléfonos móviles tiene un impacto de por vida en los niños. Puede que no sean necesarios 10 años para que la vida de los niños experimente cambios trascendentales. Entonces, ¿qué impacto tiene jugar con el móvil en los niños?

Jugar con el móvil puede tener efectos adversos en el cerebro. Jugar con su teléfono móvil en una posición durante mucho tiempo producirá una estimulación fija en el cerebro, lo que provocará que el cerebro humano esté en un estado de fatiga durante mucho tiempo, lo que tendrá un cierto impacto en la memoria y las capacidades cognitivas de las personas.

La satisfacción que brindan los teléfonos móviles es demasiado fácil de obtener. Una vez que te acostumbras a esta satisfacción "fácil de obtener" e "instantánea", ya no querrás hacer esas cosas de "alta inversión". Tampoco pueden "concentrarse" en un problema determinado. A los estudiantes adictos a los teléfonos móviles les resulta más difícil seguir pensando profundamente durante sus estudios. No pensar profundamente no conduce a dominar contenidos más difíciles.

Otros intentan desesperadamente encontrar tiempo para estudiar durante las vacaciones de verano, pero tú te quedas desesperadamente despierto hasta tarde jugando con tu teléfono, durmiendo hasta tarde, pensando y discutiendo con tus compañeros de clase cómo jugar y cómo actualizar. Es raro. ¿Quién puede obtener buenos resultados en el examen? Excusado es decir que.

Cuando a un niño le encanta jugar con los teléfonos móviles, los padres se enojan, lo critican y lo regañan. Los estudiantes estresados, por mucho que se diviertan con sus teléfonos móviles, se sentirán extremadamente estresados ​​una vez que se enfrenten a la realidad. El conflicto entre ideales y realidad, y el conflicto entre la voluntad personal y los padres, los coloca en una relación discordante. Es imposible ser feliz de corazón y es imposible lograr un progreso real bajo la presión de verse obligado a estudiar.

Primera frase: Hijo, cuando quieras jugar con tu teléfono móvil, primero piensa si puedes ingresar a la escuela secundaria, preparatoria o universidad ideal con tus calificaciones actuales.

Segunda frase: Hijo, siempre habrá juegos para móvil, pero el examen sólo te da una oportunidad. ¿Qué harás si no logras ingresar a tu escuela ideal?

La tercera frase: Hija mía, debes entender que son tus padres y el conocimiento los que pueden mantenerte con vida, no los teléfonos móviles ni los juegos.

En particular, diles a tus hijos que tus padres pueden criarte antes de que llegues a la edad adulta, pero no pueden criarte como un "bebé gigante" por el resto de tu vida. Por eso, la mayor esperanza y esperanza de tus padres. ¡La responsabilidad es cultivar tu capacidad de sobrevivir! Esta capacidad proviene de estudiar, luego ser admitido en una universidad ideal, encontrar un buen trabajo después de graduarse y, finalmente, poder independizarse después de dejar a sus padres.