Tagore "El árbol de Baniano"
Tú, baniano de cabeza peluda que está junto al estanque, ¿te has olvidado de ese niño que una vez hizo un nido entre tus ramas como un pájaro y luego te abandonó?
¿Recuerdas cómo se sentaba frente a la ventana y se maravillaba ante el enredo interminable de sus raíces que penetraban hasta el suelo?
Cuando las mujeres se acerquen al estanque a llenar sus cántaros de agua, tu enorme sombra negra se balanceará sobre el agua, como si estuvieras luchando por despertar del sueño.
El sol baila sobre las ondas, como una pequeña lanzadera dorada que nunca deja de tejer un tapiz dorado.
Dos patos nadaban en sus reflejos junto a las plantas acuáticas, mientras el niño seguía sentado tranquilamente pensando.
Quiere convertirse en brisa y pasar sobre tus ramas susurrantes; quiere ser tu sombra, tendida con el sol sobre el agua; o quiere ser un pájaro posado en tu punta más alta; flotan como esos patos entre las plantas acuáticas y los reflejos.