Red de conocimiento informático - Material del sitio web - Mi novia me pidió que le comprara un teléfono móvil. ¿Deberíamos gastar dinero el uno en el otro cuando estamos en una relación?

Mi novia me pidió que le comprara un teléfono móvil. ¿Deberíamos gastar dinero el uno en el otro cuando estamos en una relación?

Cuando estás en una relación, también debes pagar de acuerdo con tu propia situación financiera. Si la situación financiera no es buena, definitivamente no es bueno si la otra parte te pide comprar cosas que están más allá de tu capacidad. Cuando dos personas están juntas, es necesario que un niño le dé un pequeño obsequio a una niña, pero no debe ser demasiado caro. Si está más allá de sus posibilidades, no le importará dárselo. Si está claro que sus habilidades no son buenas, pero aún así finge estar gordo, fácilmente le generará presión financiera.

Cuando estás enamorado, es razonable llevar a tu mujer a cenar o a ver una película. Esta es la forma normal de llevarse bien entre amigos y amigas. Si una niña toma la iniciativa de decirle a un niño que quiere algo, pero el precio no es barato, entonces no todos los niños aceptarán este comportamiento. Cuando están enamorados, los chicos también deben tener cierto grado de autonomía y no deben acceder a todas las peticiones de la novia. Si no cumples tu promesa, perderás aún más la cara.

Si eres una novia a la que le gustas mucho, ella no aumentará tu carga. Si la otra parte obliga a tu novio a comprarlo, entonces puedes considerar la posibilidad de renunciar a esta relación. Una relación debe basarse en una relación, pero si es demasiado materialista, esa relación no hará que la gente sienta ninguna felicidad. Si la relación entre dos personas es firme, la niña realmente sabrá cómo ahorrarle dinero al niño y también sentirá lástima por el dinero del niño. Si una chica no quiere vivir contigo, entonces definitivamente lo hará por motivos económicos.

También es apropiado que los niños den con amor y den pequeños obsequios, pero deben ser moderados. Algunos chicos, debido a problemas, cumplen con todos los requisitos de las chicas, pero al final, cuando ya no pueden permitírselo, se marchan desesperados. Quizás el niño sienta que si no puede acceder a la petición de la niña, perderá la cara.