A menudo juego juegos de computadora, como World of Warcraft. Si toco el mouse durante mucho tiempo, ¡me sudan el teclado y las manos!
La hiperhidrosis es causada por una sobreexcitabilidad de los nervios simpáticos por razones desconocidas, como estrés mental, excitación, presión excesiva o aumento anormal de la sudoración de las palmas debido a las altas temperaturas en verano.
En Taiwán, una encuesta entre jóvenes de 10 a 30 años mostró que la tasa de incidencia de hiperhidrosis de manos es de alrededor del 0,3%, lo que significa que aproximadamente uno de cada 300 jóvenes la padece. Es obvio, afecta tanto a hombres como a mujeres, y la tasa de incidencia de antecedentes familiares llega al 13% (es hereditario en la familia). La mayoría de las personas desarrollan hiperhidrosis en las manos cuando son niños y la afección empeora durante la adolescencia. Además de sudar las manos, los pacientes con hiperhidrosis son sanos y normales. La mayoría de las personas también presentan síntomas de sudoración en las plantas de los pies o en las axilas, y algunas personas también sufren de olor corporal.
El tratamiento de la hiperhidrosis de manos se divide en dos métodos: tratamiento médico y tratamiento quirúrgico. Los medicamentos utilizados en medicina interna para suprimir el sistema nervioso simpático suelen tener efectos secundarios como sequedad de boca o trastornos gastrointestinales, lo que hace que la gente tenga miedo de tomarlos durante mucho tiempo. Los medicamentos externos también son inconvenientes debido a su tratamiento limitado y la necesidad de volver a aplicarlos de vez en cuando. Dado que el tratamiento farmacológico tiene sus limitaciones, el tratamiento quirúrgico se ha convertido en la tendencia general. Los nervios simpáticos que controlan las glándulas sudoríparas de las manos se encuentran en la segunda y tercera sección de las vértebras torácicas, que se encuentran alrededor de la línea del pezón, y un poco más arriba a ambos lados de la columna posterior. Los nervios simpáticos en estas dos secciones se cortan, la mano se puede curar con el propósito de sudar. El método quirúrgico tradicional consiste en cortar el centro de la espalda, cortar el hueso donde las costillas se unen con la columna y extirpar el segundo y tercer ganglio simpático de ambos lados. El tiempo de operación es de aproximadamente 2 a 3 horas, la herida postoperatoria es de aproximadamente 5 a 7 cm, el dolor es intenso, se requiere un tiempo de recuperación prolongado y la estancia hospitalaria es de aproximadamente 3 a 5 días. Además, existe la posibilidad de neumotórax (secuelas potencialmente mortales de una fuga de aire en los pulmones que impide que los pulmones respiren), que en su mayoría ha sido reemplazada por simpatectomía endoscópica. La operación dura menos de media hora y, tras recuperarse de la anestesia, el paciente puede volver a casa ese mismo día, con una tasa de éxito del 98%.