Mi ciudad natal está en el ensayo Fengxin.
Érase una vez, mi ciudad natal, Fengxin, estaba llena de alegría y risas. Cada vez que vuelvo domino la montaña. En un momento corrí al campo y trituré un trozo de colza, y al momento siguiente saqué muchas plántulas de ajo. Mis huellas están por toda la cresta del campo y todavía estamos haciendo una barbacoa en el campo. Sin embargo, de repente un día vino un terremoto y cambió mi mundo. La pared estaba agrietada, el hueco era como una boca abierta, daba miedo. La cocina fue arrasada y convertida en un montón de escombros. Los adultos fruncieron el ceño por el desastre. Cuando un lado está en problemas, el apoyo viene de todos lados. El país nos ha enviado muchas cosas, entre ellas comida, bebida y todo lo que necesitamos. Los adultos instalaron tiendas de campaña y cabañas en campos y espacios abiertos, y la vida volvió gradualmente a la normalidad. Esa noche tuve un sueño: soñé que en mi ciudad natal se habían construido hileras de pequeños edificios de estilo occidental y que los niños llevaban mochilas nuevas y asistían a nuevas escuelas. Los adultos se pusieron a trabajar felices y su ciudad natal se volvió más hermosa.