Explosión de teléfono celular
La principal razón por la que los teléfonos móviles nos causan tanto daño es porque emiten una gran cantidad de gas al convertir la energía eléctrica en energía térmica. Si la emisión de estos gases excede con creces la tasa de liberación del propio gas, será difícil que el contenedor de la batería del teléfono móvil resista dicha expansión. Esto provocará daños en la estructura interna del teléfono e incluso provocará un cortocircuito de corriente, formando así un círculo vicioso. En este ciclo, el teléfono puede explotar fácilmente.
Además, aunque el teléfono móvil no parece estar en un estado sellado y el interior del teléfono móvil en sí es muy elástico, lo que puede aliviar eficazmente dicha deformación, la energía emitida por el gas generar y provocar una explosión al momento. Romper el material fuera del recinto de gas. El impacto que genera se puede convertir en energía cinética, y luego se produce una poderosa colisión bajo este poderoso impacto. Es muy probable que este impacto queme y reviente nuestra piel.
Entonces, después de ver un poder explosivo tan poderoso, al cargar y usar el teléfono, no lo deje en un estado de alta temperatura durante mucho tiempo, y mucho menos lo coloque en un ambiente de alta temperatura. De lo contrario, es fácil dañar nuestros cuerpos e incluso amenazar nuestras propias vidas, como este hombre en Hefei. Por lo tanto, debemos asegurarnos de que el teléfono móvil tenga un buen entorno de uso para que pueda desempeñar su máximo papel en lugar de convertirse en un arma que nos haga daño.