Cómo lograr que los niños dejen sus teléfonos
1. Sólo mediante una observación cuidadosa podemos emitir juicios precisos. No saque conclusiones precipitadas sobre sus hijos. A menudo escuchamos a los padres decir: "Los niños siempre juegan con sus teléfonos en casa". Pero cuando se les pregunta "¿bajo qué circunstancias juegan en sus teléfonos todos los días?" ?” y “¿con qué juegan?” pocos padres pueden dejarlo claro. Pero esta conclusión de los padres dará a los niños un malentendido: soy solo yo, incluso si juego por un corto tiempo, mis padres pensarán que me encanta jugar con teléfonos móviles. Una vez que los niños reconozcan esta evaluación negativa, perderán la motivación para cambiar ellos mismos.
2. Sólo mediante la comunicación con el paciente podemos resolver mejor los problemas. Muchos padres se enojan mucho cuando ven a sus hijos muy felices y ocupados jugando. Comunicarse cuando los niños están entusiasmados por jugar con sus teléfonos móviles a menudo pierde el buen efecto. Se recomienda que los padres opten por comunicarse cuando sus hijos estén emocionalmente estables y el tiempo esté relativamente completo; y deben predecir las diversas reacciones de sus hijos y hacer planes antes de comunicarse, y los padres deben escuchar pacientemente los pensamientos de sus hijos; Es necesario recordar a los padres que no deben esperar que el problema se resuelva mediante una sola comunicación, ni obligar a sus hijos a dar garantías.
3. Las actividades de alta calidad pueden reducir la dependencia de los niños de los juegos. Cuando los padres acusan a sus hijos de jugar con teléfonos móviles, ¿han pensado alguna vez en lo que pueden hacer sus hijos si no juegan con teléfonos móviles? ¿Qué puede ser a la vez gratificante y relajante para los niños? Para reducir la dependencia de los niños de los teléfonos móviles, los padres deben guiarlos con paciencia. Para los niños, la mejor actividad más allá de los juegos móviles es el compañerismo. Las actividades de alta calidad no se tratan de lo que juegas o haces, sino con quién juegas y con quién lo haces. A veces, por muy bueno que sea un juguete en manos de un niño, no le hará más feliz que patear piedras con sus amigos de camino al colegio. Se recomienda que los padres reserven una cierta cantidad de tiempo cada día para hacer con sus hijos cosas que puedan aportarles felicidad.
4. Sólo con una orientación correcta se podrá aprovechar plenamente la eficiencia energética de los teléfonos móviles. Los teléfonos móviles no son un flagelo y no es realista que los niños dejen de usarlos por completo. En primer lugar, los padres deben dar ejemplo a sus hijos y evitar el uso de teléfonos móviles como entretenimiento durante mucho tiempo delante de sus hijos. En segundo lugar, antes de que los niños utilicen teléfonos móviles, los padres deben establecer requisitos claros y acordar la frecuencia, el tiempo y el ámbito específico de uso. En tercer lugar, los padres deberían explicar a sus hijos los peligros que conlleva el uso inadecuado de los teléfonos móviles. Finalmente, se recomienda que los padres respeten a sus hijos y comprendan el contenido específico del uso del teléfono móvil de sus hijos, qué software utilizan y con quién chatean, etc.