Un material de composición de lecciones inolvidable
Lección, aunque es una palabra, tiene demasiado contenido. Te hará sentir arrepentimiento, culpa, enojo, desgana... Pero hay otro significado, siempre y cuando descubras su ventaja. Lo que descubrirás es que la lección también es un regalo, pero ya te has dejado engañar por su composición.
Ese día cumplí 12 años y mi padre me regaló un cachorro. Tenía ojos grandes y ojos llorosos, lo que me hacía adorable. Desde entonces, él y yo hemos sido inseparables, como un par de amigos íntimos perdidos hace mucho tiempo. Todos los días juego con él después de terminar mi tarea; cuando estoy feliz, juega conmigo cuando estoy triste, siempre me hace feliz y nuestra relación se vuelve gradualmente más profunda. Sin embargo, una vez, mientras jugaba con él, me mordió la mano de emoción y le puse cuatro inyecciones seguidas. Desde entonces, poco a poco me he vuelto indiferente y ya no es tan bueno como antes. En ese momento, mi tercera tía quería un cachorro, así que lo regalé, aunque realmente me resistía a desprenderme de él. Unas semanas más tarde, la tercera tía se lo volvió a dar a la abuela, y la abuela se lo dio a la abuela. Parecía haber notado algo y empezó a no comer ni beber. Después de todo, todavía me gustaba y el incidente ocurrió por mi culpa. Al cabo de unos días, de repente tuvo apetito, como si estuviera recargando energías. Efectivamente, una noche se fue. Busqué por todas partes, sintiendo que algo faltaba y estaba vacío. Quería llorar, pero me dije a mí mismo que no estaba calificado. Si no fuera por mí, las cosas no habrían sucedido así. Me sentía cada vez más culpable y no podía evitar pensar en ello. Siempre aparecía en mi mente cuando no lo esperaba. Este incidente también me hizo comprender una verdad: la vida no se puede tomar a la ligera, sea quien sea.
Aunque esta es una lección, nunca la olvidaré, pero me hizo comprender una verdad que el dinero no puede recuperar, un regalo intangible pero precioso, por eso lo llamo un regalo de maquillaje. .