¿Cómo miden la Tierra los satélites terrestres?
La gente también ha diseñado satélites terrestres no tripulados específicamente para medir la Tierra. Los satélites están equipados con una variedad de equipos científicos avanzados que pueden tomar fotografías continuas de la Tierra desde una altitud de cientos de kilómetros. Al mismo tiempo, estas fotografías pueden convertirse en señales eléctricas, transmitirse a estaciones receptoras terrestres mediante ondas de radio y, finalmente, restaurarse en fotografías de la Tierra.
El alcance de este tipo de fotografías es muy amplio. Existe un satélite que puede captar en una sola fotografía un área equivalente a más de 180 kilómetros cuadrados de la superficie terrestre. Los satélites terrestres artificiales giran constantemente alrededor de la Tierra. Dan una vuelta alrededor de la Tierra cada cien minutos y pueden tomar fotografías de toda la Tierra en dieciocho días.
Quizás pienses que las cámaras de estos satélites terrestres artificiales no tripulados no son tan buenas como los ojos de los astronautas en las naves espaciales. No precisamente. Estos nuevos dispositivos fotográficos no sólo tienen una resolución mayor que la del ojo humano, sino que también pueden ver a través de las nubes e incluso tomar fotografías en la noche oscura.
De esta manera, el ser humano, apoyándose en su propia sabiduría y avanzados equipos, comenzó a realizar investigaciones más extensas y profundas sobre la tierra.
Por ejemplo, con la ayuda de los satélites, los humanos pueden detectar el ciclón tropical mencionado anteriormente cuando se forma por primera vez y pueden hacer predicciones precisas de su velocidad y dirección de movimiento.
Durante mucho tiempo, la gente ha sabido muy poco sobre las condiciones internas de algunas zonas de la Tierra con condiciones naturales extremadamente duras, como vastos océanos, vastos desiertos y montañas y mesetas inaccesibles. Hoy en día, con la ayuda de los satélites terrestres artificiales, la situación es completamente diferente.
Por ejemplo, la meseta Qinghai-Tíbet de mi país, aunque muchas expediciones han entrado en esta zona en los últimos cien años, nunca han descubierto cuántos lagos hay. Incluso si se descubren algunos lagos, su ubicación es muy inexacta. Ahora, utilizando fotografías tomadas por satélites, los científicos pueden encontrar fácilmente los más de 300 lagos de la meseta tibetana y dibujarlos con precisión en el mapa. Las fotografías satelitales también pueden ayudar a la gente a encontrar depósitos minerales y fuentes de agua subterráneas, y analizar la producción agrícola. En términos militares, su papel es aún mayor. Hoy en día, cada vez existen más tipos de satélites y los campos de exploración son cada vez más amplios.