Cómo comunicarse con su jefe
Cómo comunicarte con tu jefe: Preparativos para la comunicación
Antes de comunicarte con tu jefe, saca un bolígrafo y una libreta y anota en orden todo lo que necesites hablar.
Ensaya la conversación con tu jefe con un amigo o tú solo. Si estás ensayando solo, puedes compartir lo que vas a decir con un amigo y pedirle su opinión sobre tu estilo de comunicación.
Practica gestos mientras planeas qué decir. Está dirigido principalmente a situaciones en las que puedas evitar entrar en pánico, mirar al cielo, patear, agacharte, etc.
Lleva contigo tu bolígrafo y tu libreta cuando te reúnas con tu jefe, y consulta los puntos clave que hayas preparado en cualquier momento. Al mismo tiempo, toma notas en cualquier momento cuando tu jefe te hable.
Evita utilizar palabras demasiado absolutas, como "siempre", "nunca", "tú" y "todos". En su lugar, utilice palabras como "tal vez", "podría" y "yo".
Muestra respeto escuchando atentamente a tu jefe. Repita los puntos clave que dijo su jefe para demostrar que comprende. Si no entendió algo, pídale que lo repita. Haga preguntas basadas en las respuestas de su jefe para demostrar que está concentrado y desea saber más.
A lo largo de la conversación, asegúrese de estar relajado, en control, educado, mentalmente activo y positivo en todo momento.
Al final de la conversación, expresa tu gratitud a tu jefe por tomarse el tiempo para hablar contigo y elógialo por ayudarte.
Cómo comunicarse con el jefe: la diferencia entre buenos y malos empleados
Reportaje de trabajo: los buenos empleados hablan de resultados, los malos hablan de proceso
Los líderes generalmente están muy ocupados, no necesita conocer muchos detalles, lo que necesita es un resultado conciso y alguna información valiosa.
Pedir instrucciones: los buenos empleados le cuentan sus planes, pero los malos no tienen ni idea.
Cuando pidan instrucciones, proporcione soluciones. El núcleo del liderazgo radica en la toma de decisiones y la dirección. Si no tienes idea, pide instrucciones al líder, ¿quieres que piense qué hacer? Entonces, ¿qué quieres hacer?
Resumiendo el trabajo: de lo que hablan los buenos empleados. el proceso, los malos empleados se jactan de los resultados
Resumir el trabajo no es para que elogies tus logros, sino para que expliques claramente los detalles de cada proceso y encuentres las ventajas, desventajas y áreas a mejorar. mejora, que pueden ser utilizados como referencias y consejos para el próximo trabajo.
Disposiciones laborales: los buenos empleados hablan de estándares, los malos empleados hablan de sentimientos
Sin estándares, el trabajo no tiene dirección. Por eso, a la hora de concertar el trabajo, lo más importante es aclarar los estándares de evaluación y qué nivel y nivel se puede alcanzar para alcanzar las expectativas. Sólo aclarando los estándares de evaluación para cada eslabón los resultados finales podrán cumplir con las expectativas.
Cuando se comunique con su jefe, hable más, hable primero y proporcione más preguntas de opción múltiple y de criterio. No le dé preguntas y respuestas. Puede hacer preguntas, pero proporcione soluciones y siga las suyas. instrucciones. Priorice las ideas, no sea sólo un tema de conversación.