"Mamá, quiero jugar con mi teléfono" es la mejor respuesta que he visto en mi vida.
[Los padres son los mejores maestros de sus hijos. Una lectura obligada para los padres]
"Mamá, quiero jugar con mi teléfono móvil."
Respuestas incorrectas
1. Si sigues jugando con tu teléfono móvil, te quedarás ciego."
2. "¿Por qué eres tan niño? ¡Solo piensas en jugar con tu teléfono móvil todos los días!"
3. "Si obtienes más de 90 puntos en este examen, te lo daré".
4. "¿Con qué tipo de teléfonos móviles juegan los niños? Tu objetivo es estudiar mucho". !"
Responde correctamente y dale al niño la oportunidad de explicar el motivo.
Oh, quiero jugar con mi teléfono móvil. Vale, dile a mi mamá, ¿por qué estás jugando? ¿Cuál es la razón? Deja que mamá escuche.
Nota: Ya sea que esté de acuerdo o no, darle a los niños la oportunidad de persuadir a otros y entrenar su capacidad para persuadir a otros a desafiar la autoridad es una parte indispensable e importante de la educación de élite.
Responde correctamente y dale una oportunidad al niño.
Los niños también pueden jugar, pero no más de tres veces al día y no más de 15 minutos cada vez. Si sigues este acuerdo, puedes jugar.
La respuesta correcta es ser el compañero de juegos de tu hijo tanto como sea posible.
Bebé, dejemos de jugar con nuestros teléfonos. Salgamos y aprendamos a andar en scooter. ¡Es realmente divertido aprender esta habilidad!
Nota: Si los padres quieren que sus hijos no sean adictos al móvil, deben darles el tiempo suficiente para acompañarles y que poco a poco se vayan olvidando del móvil.
Hablemos de los puntos clave. Dar el ejemplo. persistir en.
Para evitar que los niños sean adictos al móvil, los padres deberían enseñar a sus hijos a no jugar con el móvil en lugar de enseñarles mil veces en lugar de dar el ejemplo. Este tipo de educación no sólo no convence, sino que también reduce la autoridad de los padres.