Cómo completar tareas laborales de manera eficiente
Es su propia responsabilidad completar con éxito las tareas laborales. Cómo mejorar la eficiencia y garantizar la calidad en el proceso de realización de las tareas laborales es un tema al que todo instructor técnico debe prestar atención. Personalmente creo que para realizar eficientemente las tareas laborales hay que prestar atención a los “cinco imprescindibles”: 1. Tener una actitud laboral proactiva. La actitud lo determina todo. Como dice el refrán: Lo que se puede perdonar es la capacidad, lo que no se puede perdonar es la actitud. Una buena actitud tiene un buen efecto en el trabajo y una mala actitud definitivamente tiene una mala fuerza motriz. Aunque no podemos elegir nuestro trabajo, podemos elegir nuestra actitud hacia el trabajo. De acuerdo con sus propias responsabilidades y sistemas laborales, debe dedicarse a trabajar lo antes posible, incluso si el líder no lo organiza ni le recuerda, esta es la actitud laboral correcta. Una actitud laboral proactiva es una manifestación concreta de responsabilidad por el trabajo. Algunas tareas que van más allá del alcance de las responsabilidades laborales aún deben solicitarse y solo pueden implementarse después de obtener la aprobación explícita de los superiores. Para comprender bien la escala en el trabajo, debe estar familiarizado y aclarar sus responsabilidades, procedimientos de trabajo y sistemas relacionados. Prefiero aceptar críticas en el proceso de hacer las cosas que aceptar críticas en el trabajo pasivo. Sólo con una actitud de trabajo correcta podemos correr contra el tiempo en el trabajo, "irrumpir" con coraje y conocimiento, "luchar" con grandes dificultades, "trabajar" con los pies en la tierra y mantener siempre "sin azotar el látigo". El espíritu de "orientación hacia las personas" es establecer y adherirse a una perspectiva correcta del trabajo, y también es un requisito inevitable para implementar plenamente la perspectiva científica del desarrollo. 2. Tener buenos hábitos de trabajo. Un buen hábito de trabajo es el requisito previo y la garantía para garantizar que el trabajo se realice con alta calidad y eficiencia. También podría intentar desarrollar los siguientes hábitos: Primero, cree una lista de trabajo. Llevar nota del trabajo a realizar en cada momento, priorizarlo, establecer el orden y plazo de realización y completarlo en orden y a tiempo. El segundo es desglosar cuantitativamente los objetivos. Es bueno para cuantificar y refinar los objetivos laborales, dividir elementos grandes en elementos pequeños, dividir tareas complejas en tareas simples y completarlas una por una. O busque ayuda de colegas para completar el trabajo juntos. El tercero es buscar ayuda cuando se encuentren problemas. A veces enfrentaremos algunos problemas. Si estamos atrapados en una idea, puede ser una pérdida de tiempo. En este momento, es posible que tengamos más soluciones. nosotros mismos una idea para un problema, también debe comunicarse con otros de inmediato para verificar sus ideas. Generalmente, descubrir problemas en una etapa temprana ahorra varias veces más tiempo y esfuerzo que corregirlos más tarde. Cuarto, somos buenos resumiendo la experiencia. Cada vez que terminas el trabajo, es necesario calmarte y resumir. Compruebe si está bien preparado antes de trabajar y si su uso y comprensión de la tecnología en el trabajo y su cooperación con otros colegas son adecuados. Ordene su trabajo, observe sus ganancias, piense en sus errores y sintetice sus ganancias y pérdidas. En resumen, ¿dónde necesita mejorar todavía y dónde tiene experiencia de la que vale la pena aprender en el futuro? Solo así podremos evitar tomar los desvíos que hemos tomado antes, mejorar nuestra experiencia y experiencia laboral, y usar nuestra propia experiencia para guiarnos y tomar nuestros propios atajos para mejorar la eficiencia en el trabajo. El quinto es concentrarse en una cosa. La mejor manera de garantizar la eficiencia en el trabajo es concentrarse, no distraerse con cosas pequeñas u otras cosas, terminar una cosa antes de hacer otra y no hacer una cosa mientras piensa en otra. 3. Tener unas sólidas competencias básicas Las denominadas competencias básicas son las competencias técnicas del trabajo. Sin cierta alfabetización cultural y ciertas habilidades técnicas, no podrá hacer bien su trabajo ni otras tareas asignadas por el líder. El cultivo de habilidades básicas proviene de la acumulación de conocimientos, por un lado, de la propia experiencia, por otro, y del seguimiento de la tecnología industrial, por otro. Lo más importante es seguir aprendiendo. El conocimiento actual se actualiza muy rápidamente. Si no estudias, te quedarás atrás. Aprenderás mientras vivas. Si estás en este campo, te debe gustar y estudiar. Todos deben continuar profundizando, estudiando y desarrollándose en sus propios trabajos, para que no se vean limitados por la falta de conocimientos y habilidades comerciales al hacer las cosas, y no se queden varados por no poder resolver problemas. 4. Debe haber una división clara del trabajo y la cooperación. El trabajo requiere un equipo, sólo una división clara del trabajo y la cooperación sincera entre el personal pueden mejorar la eficiencia del trabajo de todo el equipo. En la cooperación, los líderes deben asumir la tarea de división del trabajo y coordinación, y aprovechar al máximo las mejores ventajas de todos para que todos puedan trabajar feliz y eficientemente.
Todos los miembros del equipo deben tomarse en serio su propio trabajo, comprender su posición en el equipo, su parte en el proyecto (trabajo), comunicarse más con los miembros del equipo y hacer un buen trabajo. Hacer su propio trabajo y al mismo tiempo. Al mismo tiempo, ayudar a otros a completar su trabajo y crear un buen ambiente de trabajo. 5. Preste atención para evitar varias malas tendencias: Primero, echar la culpa. Hay tres situaciones en las que es más probable que ocurra eludir: es fácil eludir tareas con responsabilidades vagas, eludir fácilmente cosas que no son beneficiosas o incluso perjudiciales para el ejecutor (cosas en las que no eres bueno o no estás dispuesto a hacer), y eludir fácilmente tareas con grandes responsabilidades y limitaciones de tiempo estrictas. El segundo es la repetición. Esta es una mala tendencia laboral que dedica más tiempo al trabajo y es la menos eficiente. Empezar de cero hoy y empezar de cero mañana. El líder no te presiona. Es así todos los días. Parece muy ocupado, pero no hay resultados ni efectos. El tercero es la deformación. Pensar que tienes razón reduce los vínculos laborales necesarios. Malinterpretar las intenciones de los superiores conducirá a resultados contrarios al propósito y no logrará los resultados esperados. En cuarto lugar, faltan detalles. Al ignorar pequeños detalles y enlaces, el trabajo básico no es sólido, lo que lleva a la aparición de grandes problemas. El quinto es la procrastinación. Trabaja un poco hoy, un poco mañana y el dragón nunca llegará a su fin.