Encuéntrame algunos ejemplos de momentos de la vida en los que necesitas un rival.
En Hokkaido, Japón, se produce una anguila exótica. Muchos pescadores de los pueblos pesqueros costeros se ganan la vida pescando anguilas. La vida de una anguila es muy frágil. Tan pronto como abandone las profundidades del mar, todos morirán en medio día. Lo curioso es que había un viejo pescador que iba todos los días a pescar anguilas. Cuando regresa a la orilla, sus anguilas siempre están vivas y coleando. Sin embargo, varios otros pescadores que capturaron anguilas murieron después de regresar al puerto sin importar cómo manipularon las anguilas capturadas. Como el precio de las anguilas frescas es casi el doble que el de las muertas, en pocos años el viejo pescador y su familia se convirtieron en personas ricas y conocidas. Los pescadores de los alrededores también hacen el mismo negocio, pero sólo pueden mantener comida y ropa sencillas. En su lecho de muerte, el viejo pescador le transmitió este secreto a su hijo. Resulta que el secreto del viejo pescador para mantener vivas las anguilas es colocar unos cuantos peces basura llamados lucios por todo el almacén. Las anguilas y los lucios no son la misma especie, pero también son rivales famosos. Cuando varios lucios débiles se encontraron con sus rivales en un almacén, corrieron presas del pánico entre un montón de anguilas. De esta forma mataron todas las anguilas muertas del almacén.
Podrás sobrevivir mejor si tienes oponentes.