Cómo hacer pegatinas caseras para alumnos de primaria
La forma de hacer lindos y sencillos stickers de libro mayor es la siguiente:
Preparación del material: stickers redondos, tijeras y libro mayor.
1. Primero, puedes colocar las pegatinas de manera plana sobre el libro mayor, también puedes arrugarlas y luego pegarlas, o puedes superponerlas y aplicarlas dibujando a mano para hacerlas más interesantes.
2. Puedes cortar la etiqueta adhesiva redonda por la mitad y pegarla recta, o puedes cortarla en un patrón ondulado o irregular y pegarla. También puedes tener un cepillado pintado a mano. Efecto en la pegatina. Puedes agregar algunos pequeños trozos de papel y pequeñas cintas. O ensamblarlos para que parezcan un automóvil o una isla.
3. Corta el círculo en una esquina pequeña o en varias esquinas pequeñas para hacer un collage. Puedes extenderlo y complementarlo desde el interior de la esquina hacia el exterior, y puedes hacer un collage en forma de un pequeño. flor.
4. Ahueca el círculo y luego decora la pegatina ahuecada. Por ejemplo, puedes utilizar materiales de personajes para rellenar la pegatina del círculo ahuecado.
5. Puedes cortar las etiquetas adhesivas redondas una por una. Puedes cortar líneas rectas o formas onduladas, o puedes cortarlas en pequeños pliegues. También puedes recortar los elementos que te gusten en las pegatinas y utilizarlos, como materiales de personajes, materiales de texto, etc.
Pegatinas del manual:
Las pegatinas del manual generalmente se colocan en la mano. Se adjunta papel de dibujo y algunos patrones hermosos. El papel de libro mayor se usa especialmente para registrar. . Lleve un diario y registre la felicidad o infelicidad de cada día. Los diarios se encargan de pegarlo. Las pegatinas del manual están pegadas directamente al manual. Esto cumplió un hermoso deseo de un estudiante de primaria chino.
El registro más antiguo del manual debería estar en la "Colección Especial del Manual Zhini": "En 1862, cuando la misión japonesa en Europa pasó por París, compraron un manual y se lo llevaron de regreso al país. En aquella época era común en Europa guardar los billetes a mano, pero su apariencia permitió que en Japón circularan varios productos importados similares”