Contenido promocional del conocimiento sobre prevención de epidemias.
Usar mascarilla es una forma eficaz de prevenir enfermedades infecciosas respiratorias como el COVID-19 y la gripe. No sólo te protege a ti mismo, sino que también protege a los demás. Se deben seleccionar máscaras con niveles de protección adecuados según los diferentes niveles y entornos de riesgo epidémico. Por ejemplo, en lugares concurridos, en ascensores y en transporte público, debe usar mascarillas médicas desechables o mascarillas quirúrgicas.
Cuando use una mascarilla, recuerde: la mascarilla cubre la nariz, la boca y la barbilla, y la pinza nasal debe presionarse con fuerza cuando la mascarilla se ensucie, se deforme, se dañe o tenga un olor peculiar; debe reemplazarse a tiempo. Cada máscara debe usarse de forma acumulativa. El tiempo no debe exceder las 8 horas. No se recomienda reutilizar máscaras que se hayan utilizado en autobuses u hospitales entre regiones. Nota: No use la mascarilla hacia arriba o hacia abajo, ni por dentro ni por fuera, y no exponga su nariz cuando use la mascarilla.
Lavarse las manos con frecuencia
Lavarse las manos es una de las medidas más sencillas y eficaces para prevenir enfermedades infecciosas. Las enfermedades infecciosas respiratorias se transmiten no sólo a través de gotitas sino también a través del contacto con las manos. Si no se lava las manos rápida y correctamente, los virus y bacterias que se encuentran en ellas pueden ingresar al cuerpo humano a través del contacto con la boca, los ojos y la nariz. El lavado de manos puede cortar esta vía de manera simple y efectiva. Mantener la higiene personal de las manos puede reducir eficazmente el riesgo de enfermedades infecciosas respiratorias.
Se recomienda lavarse las manos en siete pasos (como se muestra en la imagen). La frecuencia del lavado de manos depende de la situación específica. Lávese las manos rápidamente en las siguientes situaciones: después de regresar de salir, antes de usar una mascarilla y después de quitarla, después de tocar lágrimas, secreción nasal, esputo y saliva, después de taparse la tos y los estornudos con las manos, después de atender a pacientes , antes de preparar alimentos, antes de comer, etc. Después de usar el baño o tocar instalaciones u objetos públicos (como pasamanos, manijas de puertas, botones de ascensores, monedas, entrega urgente, etc.). ), y antes de cargar al bebé y alimentarlo.
Cuando sea inconveniente lavarse las manos al salir, puede elegir un desinfectante de manos que contenga 75% de alcohol, cloro o peróxido de hidrógeno para limpiarse las manos. Aplica desinfectante en tus manos y frótalas durante 15 segundos. El desinfectante de manos no se recomienda como método de limpieza de manos de rutina y solo debe usarse al aire libre cuando no esté disponible lavarse las manos con agua y jabón.
Acudir menos a lugares públicos concurridos.
Los lugares públicos están abarrotados de gente y el tráfico es elevado, y se desconoce el riesgo de contagio. Es difícil mantener la distancia de 1 metro entre las personas. Una vez que una persona está infectada con el virus, puede transmitirse fácilmente de persona a persona sin una protección eficaz. El riesgo de propagar el virus es mayor en lugares públicos con poca circulación de aire.