¿Cuáles son los 7 hábitos del habla que es necesario corregir?
En la vida diaria, si prestamos un poco de atención, encontraremos que muchas personas tienen algunos malos hábitos en su lenguaje hablado. Aunque estos problemas no tienen una importancia decisiva, si no les prestamos atención afectarán en gran medida la eficacia de nuestras conversaciones.
Cuando la gente común habla, a menudo es propensa a sufrir los siguientes problemas:
(1) Usar fórmulas redundantes
A algunas personas les gusta usar demasiadas o innecesarias. fórmulas. Por ejemplo, a algunas personas les gusta agregar palabras como "naturalmente" o "por supuesto" en todas partes; a otras les gusta agregar demasiados clichés como "hablando con franqueza" y "honestamente"; pregunta a los demás "¿qué entiendes?" escuchas claramente"; a algunas personas les gusta decir siempre "tú lo dijiste" o "qué piensas", etc. Es posible que usted mismo no sienta este tipo de problema en absoluto. La mejor manera de superar este tipo de problema es pedirles a sus amigos que se lo recuerden todo el tiempo.
(2) Hay ruido
Algunas personas hablan muy bien, pero hay mucho ruido sin sentido mezclado entre sus palabras. Sus narices siempre están roncando, o sus gargantas parecen estar siempre bloqueadas, y tosen ligeramente, o usan un prolongado "Ay" al comienzo de cada frase, como si tuvieran miedo de los demás. Era como si no pudiera. No escucho sus palabras con claridad. Estos problemas pueden eliminarse siempre que esté decidido.
(3) Demasiados proverbios
Los proverbios son originalmente palabras humorísticas y persuasivas, pero demasiados proverbios no son buenos. Usar demasiados proverbios a menudo hace que los demás se sientan simplistas y sensacionalistas, lo que no sólo no ayuda a mejorar su capacidad de persuasión, sino que hace que el oyente se sienta incómodo.
Los proverbios pueden hacer que una conversación sea vívida y poderosa sólo cuando se usan en el lugar correcto. Al utilizar proverbios, debemos intentar que sean lo más apropiados posible.
(4) Abuso de palabras y frases populares
Algunas palabras y frases populares suelen utilizarse de forma indiscriminada. Por ejemplo, se ha abusado de la palabra "××王". "Rey" se impone a todo, como "Rey de SMS", "Rey del sonido original", este "Rey" y ese "Rey", lo que confunde a la gente.
(5) Les gusta especialmente usar una palabra
A algunas personas les gusta usar una palabra especialmente porque son perezosos y se niegan a usar su cerebro para encontrar palabras más apropiadas, o para otros Razones: Una palabra o palabra puede expresar una variedad de significados, independientemente de si la palabra o la palabra en sí tienen tantos significados. Por ejemplo, a mucha gente le gusta usar la palabra "genial". Todo se volvió grandioso en sus palabras. "Eres tan genial", "Esta flor en maceta es tan genial", "Hoy almorcé muy bien", "Este lote de productos se vendió a un precio excelente", etc., dando a los demás una impresión llamativa. Por lo tanto, debemos recordar tantas palabras como sea posible para que nuestras expresiones sean lo más precisas y diversas posible.
(6) Demasiado trivial
Muchas personas son molestamente triviales en sus conversaciones.
Por ejemplo, es más fácil contar una historia vívida y emocionante sobre las propias experiencias, y a muchas personas también les gusta escuchar a otros hablar sobre sus experiencias personales. Sin embargo, cuando muchas personas hablan de sus propias experiencias, las describen ciegamente de manera sencilla, sin priorizarlas. Sienten que todo lo que han vivido tiene un sabor y es necesario hablar de ello, lo que confunde a los oyentes. y desorganizado.
Al contar experiencias o historias, debes ser bueno centrándote en los puntos clave y entender dónde está interesado el oyente, y utilizar menos diálogo. Sea lo más detallado posible en los puntos importantes. Para otros lugares, explícalo en una o dos frases y olvídalo.
(7) Le gusta usar la exageración
La exageración tiene el efecto de llamar la atención. Sin embargo, no podemos exagerar demasiado, de lo contrario, los demás no creerán lo que usted dice.
En la vida real, es imposible contar cada vez una noticia "muy importante", ni contar cada vez la historia "más conmovedora" o el chiste "más ridículo". Por eso, no uses palabras. como "muy", "más" y "extremadamente" en todas partes. De lo contrario, cuando tienes un "más" real entre innumerables "más", ¿cómo lo expresas? ¿Puedes decir "este asunto es el más importante para mí"? Si realmente dices esto, los demás se mostrarán indiferentes, porque pensarán que eres alguien a quien siempre le gusta exagerar.
Además de los siete puntos anteriores, también debemos prestar atención a nuestro tono, gestos, expresiones faciales, etc. en la conversación, y esforzarnos en que todos los aspectos estén coordinados y sean adecuados.
De esta manera, podemos potenciar enormemente el atractivo de nuestras palabras.