El mundo oculto
Antes de que los científicos confirmaran que la Tierra no era hueca en la década de 1950, el interior de la Tierra siempre había sido un lugar muy misterioso para los humanos. El interior de la Tierra es en gran medida un "mundo oculto". Las temperaturas y presiones extremadamente altas impiden la entrada del detector. Por tanto, en circunstancias normales, los humanos no podemos detectar directamente el núcleo de la Tierra.
Pero los geólogos pueden sondear el interior de la Tierra mediante ondas sísmicas. Con este método, los científicos pueden escanear y mapear el interior de la Tierra como si fuera una tomografía computarizada.
Existen dos tipos de ondas sísmicas, una es de onda longitudinal y la otra es de onda transversal. Independientemente del tipo de onda, su velocidad y dirección de propagación cambian a medida que viaja a través de diferentes medios. Recientemente, los científicos han descubierto a través del monitoreo de ondas sísmicas que el núcleo de la Tierra, el núcleo interno, no es enteramente un núcleo de hierro sólido y monótono. Algunas partes del mismo pueden ser como "pasta" con cierto grado de fluidez.
La opinión predominante en los círculos académicos siempre ha sido que el núcleo interno es un núcleo de hierro sólido y compacto, y que sólo el núcleo externo que lo rodea es líquido. Pero esta vez los investigadores observaron ondas sísmicas generadas por cinco terremotos que ocurrieron en diferentes lugares y analizaron sus cambios a medida que viajaban por el interior de la Tierra hacia el otro lado de la Tierra. Se descubrió que estas ondas sísmicas se desviaban inesperadamente en determinadas zonas del núcleo interno a medida que lo atravesaban.
Si estos datos son exactos, significa una cosa: estamos equivocados acerca del núcleo interno. En algunas regiones cercanas a la superficie del núcleo interno, el hierro es en realidad líquido o semilíquido.
La estructura del núcleo terrestre está relacionada con si el campo magnético terrestre se puede mantener y qué forma tendrá. Los campos magnéticos son el paraguas de la vida en la Tierra y nos protegen de los mortíferos vientos solares y los rayos cósmicos. Comprender la estructura del "mundo oculto" del núcleo interno ayudará a los científicos a comprender mejor la relación entre la estructura interna de la Tierra y la actividad del campo magnético de la Tierra.